Palma de Mallorca, España, es un destino gastronómico que ofrece una amplia variedad de opciones para disfrutar de una deliciosa comida. En esta encantadora ciudad, puedes encontrar excelentes lugares donde comer y cenar, que seguramente satisfarán tus necesidades culinarias.

Si buscas un lugar para disfrutar de un auténtico desayuno mallorquín, no puedes dejar de visitar los mejores lugares recomendados. Uno de ellos es Casa Gallega, conocido por sus mariscos y su delicioso menú del día, disponible todos los días, incluyendo las cenas. Otro lugar que destaca es Pintamonas, un restaurante en el centro de Palma que ofrece el mejor menú del día con platos caseros y sabrosos. Si prefieres opciones más tradicionales, La Balanguera te ofrece platos del día caseros que no puedes perderte.

Para aquellos que deseen degustar raciones de alta calidad, El Txoko de Martín es una excelente opción, pues cuenta con una estrella Michelin. Mientras que para aquellos que buscan la auténtica experiencia de una casa de comidas de toda la vida, Casa Julio es un lugar que no puedes dejar pasar. Si eres amante del marisco, El Viejo y el Mar te ofrece los mejores platos a precios justos.

Si prefieres opciones más informales, Palma de Mallorca tiene varios lugares para disfrutar de tapas y pinchos. Es Vaixell es un bar donde podrás disfrutar de un llonguet con vistas al mar. Bar Mavi es conocido por sus tapas y variats a precios económicos. En De Tokio a Lima podrás degustar la exquisita cocina nikkei, una fusión peruano-japonesa, en una terraza espectacular. Además, Vermutería La Rosa te hará sentir como si estuvieras en otra época, ofreciendo una experiencia única en una casa de comidas.

Por supuesto, no puedes visitar Palma de Mallorca sin probar las famosas ensaimadas. Recomendamos visitar Orxatería y Heladería Ca’n Joan De S’aigo, un lugar con más de 300 años de historia en el casco histórico de la ciudad, o Horno Santo Cristo, fundado en 1910. Otros lugares donde encontrarás deliciosas ensaimadas son Forn des Teatre, Pastelería Cladera y Forn Fondo, todos ellos con una larga tradición de repostería artesanal.